Desde que la pareja formada por el alemán Nick Wagner y Elza Carrozza, nacida en Brasil, pero residente en Munich durante buena parte de su vida, divisó la silueta de La Graciosa por primera vez desde el Mirador del Río en las vacaciones de Navidad de 1969, su vínculo con esa isla no se ha roto. En 1970 comenzaron a visitar Caleta de Sebo de forma asidua, entre dos y tres veces al año, convirtiéndose en los primeros alemanes en pasar largas temporadas en La Graciosa hasta que en el año 2000 compraron un solar y se construyeron una casa para establecerse de forma definitiva en la isla en 2001, después de su jubilación.
Ahora, la unión de Nick con La Graciosa es eterna. El alemán murió el pasado dos de febrero en el hospital Doctor José Molina Orosa, en Arrecife, a donde fue trasladado tras sufrir un derrame cerebral que le afectó al sistema respiratorio, explicó ayer su viuda. Tenía 81 años. Sus restos mortales fueron incinerados al día siguiente en el crematorio situado junto al cementerio de San Román, en Arrecife, y el pasado sábado realizó su último viaje de vuelta a su particular paraíso, el que descubrió hace casi medio siglo. Las cenizas de Nick descansan desde esa jornada en el cementerio de Caleta de Sebo.
«Mi marido me ha dejado un vacío muy grande. Está enterrado en La Graciosa, donde él quería y tenemos muchos amigos, y aquí me quedaré yo también», manifestó Elza. Agradeció la acogida que le han dispensado los gracioseros y las muestras de apoyo tras la inesperada pérdida de Nick.
Nick era doctor en Ciencias Políticas y realizaba documentales junto a su esposa, doctora en Lengua y Literatura Alemana y Portuguesa, para los canales ARD y ZDF de la televisión alemana. En 2012 la editorial lanzaroteña Ediciones Remotas publicó La Graciosa, libro en el que se recogen 77 imágenes tomadas por el matrimonio durante los años setenta y ochenta en la isla. Es una selección de las casi 2.000 imágenes sobre La Graciosa pertenecientes al archivo de Nick y Elza, el cual iniciaron en los años setenta. Parte de ese trabajoy grabaciones sobre la isla lo han cecido al proyecto del Cabildo de Lanzarote memoriadelanzarote.com y se puede ver en la página web del mismo nombre.
La concejala delegada para La Graciosa, Alicia Páez, destacó este lunes «la gran aportación» que el matrimonio ha hecho a la historia de la isla con su trabajo, puesto que «retrató La Graciosa como era antes», cuando la actividad turística era prácticamente inexistente y la pesca centraba la economía graciosera.
«Ha sido una gran pérdida para la isla», lamentó Páez, «por todo el material que ambos realizaron plasmando con sus fotos y documentales las necesidades y también las bellezas de La Graciosa».